Lo que no resulta entretenido en lo absoluto son los ridículos tiempos de carga que hay que tolerar antes de correr. Hablamos de un minuto para cualquier competencia estándar y por lo menos 15 segundos si se desea reiniciar. Un minuto se dice fácil, pero hablamos de casi una hora viendo la pantalla de loading si sumamos todos y cada uno de los más de 50 eventos, sin mencionar que en línea las cosas pueden ponerse peores, ya que por defecto hay que esperar 30 segundos antes de entrar en cualquier evento. Éste es, sin lugar a dudas, es el detalle más negativo de la experiencia y uno que esperamos pueda corregirse con parches más adelante.

Ahora bien, ya que hablamos de online, Wipeout 2048 es un título que ofrece tres opciones, siendo la más llamativa, el juego cruzado, que agrega cuatro pistas provenientes de Wipeout HD y donde se puede competir con oponentes de PlayStation 3. Las otras dos son Campaña Online y Ad Hoc.

Como indica su nombre, la campaña Online es similar a la local, sólo que además de competir por el liderazgo en posición o puntos, hay objetivos preestablecidos, como impactar a cualquier rival con un arma, a dos rivales o a uno en particular, o no terminar en el último lugar. Y Ad Hoc es para quienes desean jugar con personas que se encuentran en el mismo lugar, aunque implica competencias con muchos menos participantes, lo que puede resultar a toda luces aburrido.

En ninguna de las modalidades antes mencionadas experimentamos problemas de latencia. La Campaña Online es de fácil acceso y nos pone a jugar instantáneamente, no así el juego entrecruzado, que nos llegó a expulsar en más de una ocasión y para el cual fue complicado encontrar partidas. Otro aspecto a mencionar es la falta de libertades para el jugador en línea. En otras palabras, la máquina siempre decide cómo, dónde y qué tipo de competencia se correrá y al usuario sólo le queda votar por una de dos opciones.

Es así como llegamos al asunto de los controles; siempre importante cuando se trata de una plataforma caracterizada por la introducción de argumentos técnicos innovadores como Vita. En el caso de Wipeout 2048 existen tres esquemas: Wipeout, Piloto y Toque e Inclinación, siendo este último el que “saca provecho” de las capacidades de movimiento del dispositivo. Usamos las comillas porque, al menos en nuestra experiencia, jugar inclinando la consola resultó en una experiencia imprecisa y frustrante. El sistema registra los ajustes de dirección sólo cuando estos son muy pronunciados, catapultando siempre a las naves contras los muros. Para minimizar el efecto, se puede recurrir a los alerones, pero Wipeout es demasiado frenético y demanda exactitud, así que no recomendamos esta opción en lo absoluto. Por otro lado, jugar en modo Piloto o Wipeout es lo más disfrutable y responsivo.

Al final del día y amén de los detalles negativos que ya documentamos, Wipeout 2048 es un digno exponente de la franquicia, que respeta sus principios fundamentales de velocidad, accesibilidad y sobre todo, diversión. El problema es que no innova prácticamente en nada y aquello original que pretende introducir, funciona de regular a mal. Así las cosas, tanto neófitos como veteranos de la franquicia pasarán un buen rato, pero notarán varios aspectos a mejorar.