Anoche y luego de esperar durante varias horas finalmente se liberó el esperado parche 7.00 de Dota 2, el cual dentro de su masivo listado de cambios (que una de las personalidades del juego, Purge, estuvo analizando por más de ocho horas) pesa cerca de 6.1 GB, transformando el juego casi por completo, pero manteniendo sus bases.
A pesar de los bienvenidos cambios a la meta del juego como un todo, las primeras horas de vida del parche no han sido de las más cómodas. La gente del subreddit del juego ha estado listando partes de los problemas del juego, mientras algunos tienen una considerable baja de FPS, otros han tenido un aumento, otros encuentra la nueva interfaz molesta a la vista, aludiendo a lo minimalista del HUD, a lo que se suma el océano de bugs.
Aparentemente uno de los principales dramas es que el juego sencillamente estaría haciendo uso de demasiados recursos en el computador. Por ahora solo queda esperar a que Valve arregle el juego, en lo que estamos seguros será una larga semana para IceFrog y compañía hasta tener todo de manera estable.
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