Polémica internacional está causando en estos momentos la noticia de que el Gobierno de Bolivia pedirá a Ubisoft que se remuevan todas las referencias geográficas y símbolos patrios que se encuentran en Tom Clancy's Ghost Recon: Wildlands.
Para aquellos que no estén al tanto, si bien no se menciona directamente a Bolivia, el nuevo shooter táctico de Ubisoft toma lugar en dicho pais, donde principalmente se toca el tema del tráfico de drogas. El gobierno de dicho país considera como una ofensa que los denigra como nación el estar asociado a esta clase de juego.
Contarán con el apoyo del Embajador de Francia en su territorio, Denys Wibaux. Una reunión fue realizada esta mañana con el canciller Fernando Huanacuni y el ministro Carlos Romero, donde mencionan que Wibaux hará todo lo posible para que Ubisoft reciba una carta al respecto y tome medidas.
“Hemos recibido con beneplácito la predisposición del embajador de Francia para que no se haga un daño injusto a la imagen de nuestro país con esos juegos,” mencionó Romero a la prensa.
Por ahora buscarán agotar todas las instancias diplomáticas para que sus peticiones sean realizadas y en caso de que nada sea fructífero, el estado no descarta tomar acciones legales contra Ubisoft.
La situación no deja de ser curiosa considerando que el juego ya lleva un buen par de años en desarrollo y los mismos creadores han viajado en múltiples ocasiones a Bolivia para reconocer el terreno. Ahora el gobierno boliviano quiere que se remueva toda referencia a su país en un juego que fue construido en base a eso y que se lanza al mercado este mismo martes 7 de marzo en PC, Xbox One y PS4.
Además, seamos honestos, nada impedirá que la gente quiera jugar Wildlands luego de su impresionante Beta Abierta en la cual participaron 6.8 millones de personas, el mayor número de registrados en una prueba en la historia de Ubisoft (para referencia, For Honor tuvo 6 millones en su Beta).
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