Luego de ser planeado originalmente para el pasado lunes en la noche, y tras un retraso hasta este miércoles en la noche que tuvo el juego inaccesible por horas, finalmente PUBG ya ha instaurado su nuevo sistema anti-trampas que se suma a la protección ya ofrecida por BattleEye.
Su principal misión será impedir el uso de programas de terceros para darte ventajas de gameplay, como ayuda en pantalla o remover texturas. Lamentablemente también podría afectar a programas inofensivos, como aquellos para evitar que el juego te lleve a Miramar. Sumado a ello, este parche también trajo arreglos a los sonidos de bombardeos en la zona roja, evitando que todo sea demasiado ruidoso. Más información acá.
En un dato menos positivo, por primera vez desde su lanzamiento en Early Access, el juego detuvo su explosivo crecimiento y marcó números rojos, experimentando su primera baja de jugadores. Hasta ahora no había hecho más que sumar y sumar gente pero Steam Charts indica que en los últimos días se ha experimentado una fuga de jugadores de un 2.26%, unos 36 mil jugadores menos en los últimos 30 días.
Claramente es un número pequeño comparado a quienes continúan jugando, pero no dejar de ser significativo. Muchos atribuyen esto a China, lugar donde desde diciembre se ha visto como se detuvo el crecimiento del juego mientras los residentes de ese país esperan las versiones localizadas de Tencent, desencadenando en menor interés por la versión de Steam.
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