De acuerdo con un nuevo informe del The Wall Street Journal, el fondo de inversión pública de Arabia Saudita (PIF) se encuentra a punto de cerrar un acuerdo para adquirir casi en su totalidad a Electronic Arts (EA). Si esta operación se confirma, se convertiría en una de las adquisiciones más importantes de la historia de los videojuegos, superada sólo por la compra de Microsoft cuando adquirió Activision Blizzard King.
El acuerdo se cerraría por una suma total de 55 mil millones de dólares, lo que hará que el PIF pase a ser dueña de un 93,4% de EA. Para lograr esta compra, el fondo de inversión saudí unió fuerzas con Silver Lake, una firma de adquisiciones tecnológicas, y Affinity Partners, otra firma de inversión que pertenece al político Jared Kushner, poseerían el 5,5% y el 1,1% restante, respectivamente. La compañía de esta forma dejaría de cotizar en la bolsa y pasaría ser completamente privada.
La posible adquisición ha generado preocupación entre la amplia comunidad de jugadores, que teme que el cambio de manos pueda derivar en decisiones drásticas dentro de Electronic Arts, como despidos masivos, reestructuraciones internas o incluso el cierre de estudios.
También existe inquietud respecto al futuro de las franquicias más emblemáticas de la compañía —como Dead Space, Mass Effect, Dragon Age, The Sims o Need for Speed— y cómo podría afectarles este movimiento corporativo.

El PIF ya se ha involucrado con otras compañias aparte de EA
No es la primera vez que el fondo de inversión saudí se involucra en la industria del videojuego. En años anteriores, el PIF ha realizado inversiones minoritarias en compañías de gran peso como Nexon, Embracer Group, Capcom y Nintendo.
Asimismo, el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohammed bin Salman, adquirió el 96% de SNK a través de la subsidiaria Electronic Gaming Development Company, una operación que describió como estratégica para el país. Su movimiento más reciente ocurrió este mismo año, cuando el fondo financió un DLC gratuito para Assassin’s Creed Mirage que permite visitar Al-Ula, un enclave arqueológico saudí.
Es evidente que su relación con el mundo de los videojuegos ha crecido con el pasar de los años, y se certifica con esta compra que los vuelve los propietarios de una de las empresas más importantes de este sector.

Habrá que esperar a que las entidades antimonopolio revisen el caso y aprueben la compra. El reporte del Wall Street Journal señala que es inusual que un fondos soberanos posea la participación mayoritaria en un consorcio ya que por lo general suelen ser las firmas de capital privado las que cuentan con más experiencia en la gestión de empresas cuando son recién adquiridas, por lo que tendremos que ver como harán para gestionar esto.
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