Desde que se dieron a conocer, los nuevos aranceles impuestos por Donald Trump, actual presidente de Estados Unidos, ha hecho temer a muchos consumidores con un aumento de precio de varios productos. Y un nuevo informe publicado por la Consumer Technology Association (CTA), advierte sobre el impacto que podría tener esta medida, con un efecto especialmente severo sobre los videojuegos y consolas, sufriendo alzas de precios de hasta un 69,4%.
Adelantando el “peor escenario posible” para los gamers
Según el análisis elaborado por Trade Partnership Worldwide, si todas las tarifas sugeridas llegan a aplicarse en su totalidad, los consumidores podrían enfrentarse a aumentos de precios sin precedentes y una caída abrupta en el gasto y la producción económica nacional.
El documento proyecta una serie de consecuencias alarmantes en diversos sectores tecnológicos, indicando que entre ellos, el más afectado sería el de las consolas de videojuegos, con un incremento estimado de hasta el 69,4% en sus precios. Esta subida equivaldría a un aumento promedio de $428 dólares por unidad, un golpe directo al bolsillo de millones de jugadores en Estados Unidos.
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Las cifras no terminan ahí, ya que el reporte, que funciona como un ejercicio del “peor escenario posible”, indica que otros dispositivos como laptops y tablets también enfrentarían subidas significativas, con un alza proyectada del 34%. Los monitores seguirían con un 31,8%, y los teléfonos inteligentes podrían llegar a encarecerse en un 30,8%.
En conjunto, el informe calcula que el gasto de los consumidores estadounidenses podría reducirse en aproximadamente 69.000 millones de dólares como consecuencia directa del encarecimiento de estos productos.
La dependencia de Estados Unidos de la importaciones chinas, uno de los culpables
Analistas de la industria, recuerdan que el 87% de las consolas de videojuegos que se comercializan en EE.UU. provienen de China, país que sería uno de los principales blancos de los nuevos aranceles. Esto no solo amenaza con encarecer el producto final, sino también con alterar toda la cadena de suministro de la industria.
Dato que sirve para entender las razones clave de este impacto tan agudo en la industria del gaming, siendo esta dependencia la más importante. En este contexto, se estima que solamente el mercado de consolas podría representar una pérdida de $12.000 millones de dólares en gasto de consumo.
La suma, aunque ya elevada, forma parte de un panorama aún más amplio y preocupante, con efectos que ya empiezan a sentirse. Recientemente, Microsoft anunció un aumento generalizado en los precios de sus productos Xbox, desde las consolas hasta los periféricos y los juegos de producción propia.
Mientras tanto, el informe de la CTA continúa generando reacciones en cadena dentro de la industria tecnológica, que ve en estos aranceles una amenaza directa a su estabilidad y crecimiento.
