En una época dominada por tarjetas gráficas de última generación y tasas de refresco vertiginosas, el estudio independiente Terran Rift apuesta por todo lo contrario, presentando un juego con una interfaz monocromática, tipografía fósil y el zumbido inquietante de un monitor CRT. Así se presenta Xenopurge, título que acaba de estrenar demo gratuita en Steam y que llegará en versión completa el próximo 11 de julio.
Una propuesta que recuerda a las consolas a bordo de la mítica nave de Alien
En este nuevo título, el jugador asume el rol de oficial en retaguardia, operando un puñado de ordenadores que parecen salidos de un laboratorio de 1979. A través de ellos dirige, a distancia y casi a ciegas, a un escuadrón de marines que avanza habitación por habitación en naves espaciales abandonadas infestadas de criaturas hostiles.
Y lejos de manejar a los soldados de forma tradicional, el usuario establece comportamientos y protocolos antes de cada incursión, cuándo reagruparse, cuándo detenerse, qué priorizar al abrir una compuerta o en qué momento retirarse al punto de extracción. Durante la misión, la única ventana a la acción es un mapa cenital abstracto donde figuras geométricas sustituyen a tropas y monstruos.
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La ausencia de detalles alimenta la imaginación, donde cada pitido de alerta o destello en pantalla se convierte en un disparo de adrenalina. Y a medida que la horda alienígena crece, navegar esos menús de estética retro se vuelve un ejercicio frenético.
Es así como la sensación de “ser el tipo que guía al equipo desde la base” está lograda con sorprendente eficacia, gracias a una decisión visual minimalista que, como ya hiciera Duskers en 2016, demuestra que el terror también se cuece con líneas de código verdes sobre negro.
Progresión modular y sabor a auto‑battler
Entre incursiones, la escuadra puede mejorar sus estadísticas, armamento y rutinas de IA, donde un especialista cuerpo a cuerpo, por ejemplo, aprende a disparar mientras carga o un tirador gana precisión con cada enemigo abatido. También se desbloquean nuevas órdenes, desde dirigir a una sección concreta del mapa hasta establecer prioridades de fuego.
Es, en esencia, un auto‑battler camuflado (un subgénero de los juegos de estrategia), aunque al menos en la demo, no alcanza todavía la profundidad de construcción de “builds” característica del género. Pese a momentos de auténtico infarto, superar la primera partida no implica grandes quebraderos de cabeza si uno elige mejoras al azar.
El estudio promete que la versión final añadirá escuadras iniciales alternativas y meta‑progresión para el comandante, elementos desactivados en la demo que deberían aumentar la rejugabilidad y la “mordida” estratégica.
Para terminar, quienes deseen comprobar de primera mano esta paradoja retrofuturista, pueden descargar la demo gratuita en Steam en este enlace, la cual entrega suficientes partidas para decidir si el enfoque minimalista y la gestión indirecta, encajan en el gusto de cada jugador.
This War of Mine, juego de supervivencia con 94% de reseñas positivas, cuesta menos de 1 dólar en Steam
En un contexto donde los videojuegos independientes siguen destacando por ofrecer experiencias profundas y fuera de lo convencional, This War of Mine vuelve a captar la atención gracias a una promoción histórica. El título de 11 bit studios, conocido por su enfoque crudo sobre el conflicto bélico desde la mirada de los civiles, ha alcanzado su precio más bajo en Steam.
This War of Mine fue lanzado en 2014 por los creadores de Frostpunk y propone una experiencia de supervivencia en medio de una guerra urbana, inspirada en conflictos reales como el sitio de Sarajevo.
Y hasta el 23 de junio, puede adquirirse por tan solo 0,99 dólares, una cifra simbólica considerando el impacto emocional y narrativo que propone.
