Lo que comenzó como la inesperada irrupción de una mascota real en una reunión de trabajo, se transformó en una mecánica clave para Arc Raiders, ya que fue digitalizado para convertirse en Scrappy, el gallo que sirve de salvavidas para los jugadores derrotados.
El entorno de Arc Raiders se define por su hostilidad implacable y cuando el jugador no está siendo cazado por monstruosidades metálicas que caen del cielo, corre el riesgo de ser emboscado por otro jugador de gatillo fácil mientras intenta ocuparse de sus propios asuntos.
Pero justo cuando la frustración por perder el botín amenaza con abrumar al usuario, aparece un aliado inesperado para devolver la sonrisa, el cual es conocido como Scrappy, el gallo, el que recientemente se supo está basado en un ave real que pertenecía a uno de los desarrolladores y que interrumpió una reunión del estudio.
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La interrupción que lo cambió todo
Como el recolector de chatarra residente de la base Speranza, la función de Scrappy el Arc Raiders es asegurar que el jugador no se vaya con las manos vacías, otorgando algunos materiales incluso si la extracción ha fallado. Es la forma que tiene el juego de garantizar que nadie se quede estancado sin recursos para mejorar su equipo.
Y la génesis de este curioso personaje fue detallada recientemente en una publicación del blog oficial del estudio. Johan, artista 3D de Embark Studios, reveló el fortuito incidente que llevó a la inclusión del ave. Según relata el artista, en ese momento vivía con sus padres, quienes criaban pollos.
Durante una reunión vital de desarrollo a través de Zoom, la barrera entre la vida doméstica y la laboral se rompió de la forma más inesperada, ya que las aves se colaron en la casa.Según cuenta: “A mitad de la reunión de Zoom, los pájaros se colaron de alguna manera en la casa y se pasearon detrás de mí, robándose el espectáculo al instante y descarrilando la reunión por completo”.
“Entre esas aves estaba Håkan, el gallo que acabaría convirtiéndose en Scrappy”, explicó Johan.
A diferencia de la reputación agresiva que suelen tener estos animales, Johan describió a Håkan como un ser inusualmente amigable y cariñoso por lo que, fascinado por la personalidad de su mascota y la reacción del equipo, el artista decidió realizar un escaneo fotográfico (fotogrametría) del animal para introducirlo en el juego inicialmente como un “Easter egg” o secreto menor.
De curiosidad a mecánica central
En las primeras versiones, Håkan simplemente se podía ver corriendo por la zona de la cantina y el salto de Håkan, de ser un simple adorno de fondo a convertirse en Scrappy, el principal productor de recursos de Speranza, nació de la necesidad y la limitación de tiempo, dos constantes en el desarrollo de videojuegos.
El equipo de desarrollo se encontró en una encrucijada cuando el diseño del juego requirió urgentemente un “productor de recursos” para equilibrar la economía del jugador, diciendo: “Ciclábamos a través de muchas ideas: robots, gatos… ¡gatos-robot! Pero el equipo de arte no tenía tiempo para construirlos y la reunión se estancó”.
El bloqueo creativo se mantuvo hasta que alguien levantó la mano y, en un momento de brillantez pragmática, preguntó: “¿No tenemos ya un gallo?”. Así, Håkan obtuvo su gran oportunidad, pasando de ser una broma interna a una pieza fundamental del engranaje del juego.
Es así como para cerrar, la historia de Scrappy sirve como una lección peculiar para aquellos que temen perseguir sus ambiciones, lo cual es que si no hay una oportunidad a la vista, a veces es necesario irrumpir en una habitación (o en una videollamada) y crear la oportunidad uno mismo, tal como lo hizo Håkan.
En ARC Raiders estalló una “guerra masiva de facciones” que fue vista por cientos de miles en Twitch y todo por culpa de un simple maní→ Durante su desarrollo, ARC Raiders fue “un punto medio entre Shadow of the Colossus, PUBG y Left 4 Dead”→
