El nombre CaseOh quizás no te resulte familiar, pero este streamer estadounidense se ha convertido en una de las mayores sensaciones de Twitch. Actualmente cuenta con más de 7 millones de seguidores y un promedio de 52.000 espectadores por transmisión, según los datos de TwitchTracker. Al igual que muchos de sus colegas, combina la retransmisión de distintos videojuegos con un estilo desenfadado y reacciones exageradas que suelen volverse virales en redes sociales.
El oriundo de Arkansas creó su cuenta en 2018, pero no empezaría a transmitir hasta 2022. En este periodo de tres años, su éxito ha sido tan grande que en 2024 fue reconocido como “Creador de Contenido del Año” en los The Game Awards, superando a otras figuras destacadas como IlloJuan. Su vida cambió por completo tras alcanzar la fama, aunque recientemente, en una entrevista con la Vtuber Layna, el streamer confesó que nada de esto habría sido posible sin el apoyo incondicional de sus padres.

Durante la conversación, CaseOh contó que su padre le dio todo su apoyo con su iniciativa de transmitir diariamente, incluso lo ayudo a renunciar al trabajo que tenía por aquel entonces: “Mi padre me dijo: ‘No, esta es la única oportunidad que vas a tener.’ Llamamos al jefe, y quedó hecho. Y me alegro, porque al final valió la pena”.
“Mi madre fue mi primera fan, incluso antes de ser Streamer de Twitch”

En cuanto a su madre, el streamer contó que ella fue su primera fan y que lo veía jugar videojuegos mucho antes de que se dedicara al streaming. “Siempre ha estado ahí durante toda mi vida, incluso antes de todo esto. Cuando empecé, me dijo que debía intentarlo una vez más”, recordó. Sus palabras conmovieron profundamente a Layna, quien no pudo evitar emocionarse y comentar lo tierno del gesto, mientras el chat se llenaba de mensajes de apoyo y aplausos para el creador.
Su apoyo no terminó ahí, ya que su madre también es una de las moderadoras de su canal de Twitch y cuenta con su propia cuenta de X (@caseohs_mom), donde suele publicar mensajes sobre su hijo e incluso responder a algunos de sus seguidores. “No me importaba qué tan tarde fuera ni qué tan temprano tuviera que levantarme. ¡Tenía que tener mi hora sentada a su lado en su habitación viéndolo jugar! Amé cada minuto de eso. Era increíble, incluso con nuestra velocidad de internet de solo 10 Mbps”, escribió en respuesta al comentario de un usuario.
Este caso refleja lo fundamental que puede ser el apoyo de los padres a la hora de perseguir los propios sueños, y cómo, con un poco de suerte y constancia, ese respaldo puede transformarse en grandes logros. En una época en la que muchos padres aún critican a sus hijos por pasar tiempo jugando videojuegos, resulta inspirador ver historias como esta, donde la comprensión y el acompañamiento marcaron la diferencia.
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