Luego de que una madre de Florida iniciara una campaña para retirar las figurillas de Breaking Bad de las tiendas Toys 'R' Us, la cadena vetó la línea de productos, desatando la ira del actor Aaron Paul (Jesse Pinkman), quien cuestionó la moral de la empresa al retirar estos juguetes para adultos pero conservar los juegos violentos.
"Esperen, ¿así que @ToysRUs retiró todas las figuras de Breaking Bad de sus estantes y aún vende Barbie? Hmmmm... me pregunto cuáles son más dañinos.", dijo primero Paul vía Twitter. "¿Y qué hay de todos esos videojuegos violentos que venden en @ToysRUs? ¿Aún venden esos? La mamá de Florida realmente nos arruinó a todos.", añadió.
Aunque puede interpretarse como una crítica a los videojuegos, en realidad es una a la lógica de la tienda, pues las figuras de Breaking Bad estaban ubicadas en una sección para coleccionistas adultos, del mismo modo en que los juegos para mayores de edad vienen con una clasificación y por eso se venden a un consumidor adecuado.
Con base en lo anterior, un joven californiano inició una segunda campaña, ésta para devolver los juguetes a la tienda, la cual acumula hasta este momento más de 35,000 firmas
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