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Las últimas horas ha resultado en un verdadero «terremoto» financiero para el conglomerado financiero de Activision-Blizzard. La empresa que a principios de año sufrió la salida de altos ejecutivos financieros, el pasado 10 de enero anunció la renuncia su actual director de operaciones en conjunto con el retiro del trato comercial entre Bungie y la franquicia de «Destiny».
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Los dos movimientos afectaron grandemente a la compañía después de que Mike Morhaime, el más de 10 años director de la franquicia «Call of Duty» y quien generó una remuneración tras la marca que hoy es más valiosa inclusive que todo el universo cinematográfico de Marvel, partiera oficialmente de la compañía como el quinto gran ejecutivo que deja la compañía en los últimos 6 meses.
Así también, el anuncio del retiro de la pérdida de los derechos de «Destiny» y el retiro del acuerdo comercial de Bungie por parte de la compañía tras “no alcanzar los resultados esperados”, ha causado que su actual cotización en la bolsa de valores de Nueva York sufran notoriamente hasta el punto de perder hasta el 10% de su valor con respecto a su último cierre.
Según visualizó GameSpot, fueron cientos de contribuyentes los que ante las decisiones de la compañía vendieron sus acciones y se retiraron de la cotización en la bolsa del conglomerado en su segunda gran caída después del anuncio de Diablo Inmortal.-
(Fuente[/i])
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