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En agosto de 2018, la administración del gobierno de China decretó la prohibición de estrenos de videojuegos en base a la oficina de administración local encargada de ello después de que una reestructuración local aludiera directamente a la industria. A poco más medio año de lo sucedido, la prohibición de estrenos tanto asiáticos como occidentales vuelve a quedar totalmente bloqueada de manera indefinida en el país oriental.
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Tal como reporta Games Industry esta situación se debería a la gran lista de espera que actualmente se mantiene en el territorio nacional por parte de los desarrolladores, quienes cada vez más se muestran interesados por su expansión hacia el potencial mercado de jugadores.
En palabras del informe, las aceptaciones de nuevos títulos se reanudarán una vez que la State Administration of Press and Publications (SAPP) acabe con la lista de espera que se ha acumulado en las últimas semanas. Las autoridades determinaron que los estudios aún pueden enviar sus juegos para ser aprobados, pero serán puestos por ahora en la cola de espera. La aceptación de título se hará en orden, así que se analizará cada producto de acuerdo con la fecha en que fueron enviados para su aprobación.
Dicha situación no solo afectaría el flujo de contenido en China, sino que también compañías multinacionales como Tencent Holdings como empresa residente en el país también vería afectado sus movimientos a nivel internacional que buscarían optimizar las ganancias que ahora, se verían aludida por el retraso en sus estrenos.
(Fuente)
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