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El medio ruso Open Media, compartió a través de sus redes sociales fotografías de la prensa oficial de la presidencia de Rusia, en donde se podía observar a Vladimir Putin en un día de trabajo común y corriente. Lo curioso de esto es que el computador que se puede observar en el escritorio del presidente todavía utliza Windows XP.
La controversia está en que el sistema operativo en cuestión dejó de recibir soporte de Microsoft en el año 2014, en pocas palabras está obsoleto y es inseguro por posibles ataques informáticos. De hecho, el gobierno de Estados Unidos fue advertido en el mismo año en que perdió vigencia que dejara de ser utilizado. Por más que sea difícil actualizar material de trabajo en gobiernos debido a la burocracia, no hay excusa para exponerse al peligro.
El problema de la burocracia rusa está en que no tienen permitido usar sistemas operativos actualizados en computadoras con secretos gubernamentales. Pues, en este sentido, el último OS certificado para usar es el XP.
Por último, el gobierno ruso tiene entre sus planes actualizar al sistema operativo ruso Astra Linux. Lamentablemente para sus planes, el OS todavía no está listo, pero se espera que el 80 por ciento de los PCs lo usen para finales de este año.
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