Aunque muchos fans recuerdan el año 2000 por la era dorada de los shooters en PC, pocos mencionan Gunman Chronicles, un título que, pese a su conexión directa con Half-Life y el respaldo financiero de Valve, quedó sepultado en el tiempo. Desarrollado por Rewolf Software, un pequeño estudio fundado por el estadounidense Herbert Flower, este juego de disparos en primera persona llegó al mercado el 20 de junio de 2000, tras una trayectoria accidentada que incluyó cambios de concepto, apoyo económico de Valve… y una incómoda relación con Gabe Newell.
Un mod que evolucionó hasta convertirse en juego completo
Gunman Chronicles no nació como un juego independiente. En sus inicios, el proyecto fue concebido como un shooter PvP, pero con el tiempo se transformó en una campaña de un solo jugador basada en el motor gráfico de Half-Life. Desde entonces, pasó a ser una ambiciosa modificación que, gracias a su potencial, terminó siendo lanzada como título completo.
El equipo de Rewolf Software estaba compuesto por desarrolladores distribuidos en distintas partes del mundo, sin oficina central. Flower, su fundador, trabajaba literalmente desde el sótano de la casa de sus padres, enfrentando problemas económicos mientras buscaba terminar el proyecto. El juego hoy no está disponible en Steam ni en ninguna tienda oficial, y ni siquiera su creador sabe con certeza la razón. Flower sospecha que puede haber conflictos legales entre Valve y el publisher original, Vivendi.
Valve interviene para salvar el proyecto
En medio de las dificultades, uno de los integrantes del equipo, conocido como Banninga, se acercó directamente a Valve para solicitar ayuda financiera. Según contó Flower en una entrevista con PC Gamer, la respuesta fue positiva: la compañía aportó 20.000 dólares y fijó algunos objetivos concretos que debían cumplirse para continuar con el desarrollo.
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Un año después, Valve ofreció al equipo mudarse a sus oficinas en Seattle para completar el trabajo con mayor coordinación. Sin embargo, Flower aseguró que no quedó del todo claro que Gabe Newell esperaba que el juego se terminara rápidamente, lo cual impuso una presión que el pequeño estudio no estaba preparado para asumir.
Una relación tensa con el líder de Valve
Más allá del respaldo técnico y económico, la convivencia con Gabe Newell resultó complicada para el equipo de Rewolf, en especial para su fundador. Flower describió su relación con el CEO de Valve como “no muy buena”, usando una metáfora tan graciosa como incómoda.
“Mi relación con Gabe no era realmente buena. No es que nos odiáramos. Era como dos personas con mal aliento. Es como: ‘OK, no puedo esperar a salir de esta habitación con este tipo’”, relató Flower con franqueza a PC Gamer.
La tensión no se tradujo en conflictos abiertos, pero sí dejó en evidencia un choque de personalidades y enfoques. La informalidad del pequeño estudio contrastaba con las expectativas más estructuradas de Valve, especialmente en cuanto a tiempos de entrega y visión creativa.
Un juego desaparecido en medio de disputas
Actualmente, Gunman Chronicles permanece inaccesible en tiendas digitales, y su legado se encuentra más en las historias que lo rodean que en su influencia como videojuego. Su paso por la industria fue breve y marcado por decisiones externas, a pesar de haber contado con el motor de Half-Life y la visibilidad que otorgaba Valve.
Para Flower, el hecho de que ni siquiera él pueda recuperar fácilmente su propio juego simboliza lo que pudo haber sido y no fue. Las posibles disputas legales entre Valve y Vivendi parecen haber sellado su destino, y con ellas, la oportunidad de que esta curiosidad de los años 2000 tenga una segunda vida.
Valve prohíbe un mod de Steam por mostrar una versión falsa de la historia: “eso es revisionismo histórico”
En una medida que evidencia la presión que pueden ejercer organismos estatales en el control de contenidos digitales, la plataforma estadounidense Valve accedió a eliminar un mod del videojuego Mount & Blade: Warband, a petición del Comité de Clasificación y Administración de Juegos de Corea del Sur (GRAC, por sus siglas en inglés).
La razón entregada es que el contenido fue acusado de “distorsionar hechos históricos” en torno a uno de los episodios más sensibles de la historia contemporánea del país, el Levantamiento de Gwangju de 1980. Leer nota completa acá.
