Tras implementar un estricto control contra los bots, Twitch ha visto cómo sus cifras de espectadores se desplomaron un 24% en apenas tres días, exponiendo la magnitud de la manipulación artificial que inflaba las métricas de la plataforma. Grandes streamers también se vieron afectados con reducciones notables en sus números.
Twitch, la plataforma de livestreaming más popular del mundo, se ha caracterizado por mostrar picos masivos de audiencia en grandes eventos como Gamescom o campeonatos de esports. Sin embargo, sus números siempre han estado bajo escrutinio por la sospecha de que parte de esas cifras no provenían de espectadores reales.
Ahora, un nuevo operativo contra los viewbots, programas automatizados que inflan el conteo de espectadores, ha confirmado estas dudas. El resultado ha sido una de las caídas más dramáticas en la historia de la plataforma, generando preguntas sobre la verdadera dimensión de su comunidad activa.
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La caída más fuerte en la historia de Twitch
Según informa The Express Tribune, entre el 21 y el 24 de agosto, Twitch registró un desplome del 24% en su audiencia. El punto más bajo se alcanzó el 22 de agosto, cuando el número de espectadores fue casi una cuarta parte menor que la semana anterior, con una ligera recuperación hacia el 24 que aún mantenía un 23% de pérdida.
Los analistas apuntan a que esta disminución no se debe a un repentino desinterés del público, sino a la eliminación del tráfico no humano en los conteos. Con ello, la plataforma logró exponer de forma tangible la magnitud de la manipulación que durante años infló las métricas y generó falsas percepciones de popularidad.
Impacto en grandes creadores y la comunidad
La medida no solo afectó al promedio general, sino también a figuras de gran alcance como Asmongold, quien vio reducida su audiencia entre un 20% y 30% en el mismo periodo. Otros streamers, como Tectone, reportaron picos artificiales de bots que inflaban sus visualizaciones de 3.000 a 7.000 para luego desplomarse, evidenciando un patrón irregular en los ataques.
Pese a los resultados, expertos recalcan que la presencia de bots no siempre implica que los streamers los compraran. En muchos casos, estos programas son utilizados por terceros para alterar estadísticas y hasta sabotear canales, lo que hace casi imposible atribuir responsabilidades directas.
Una limpieza necesaria pero incómoda
El CEO de Twitch, Dan Clancy, confirmó que “miles” de pequeños creadores fueron señalados por actividades sospechosas, reafirmando el compromiso de la empresa con la autenticidad en la interacción. Esta política, aunque impopular entre quienes vieron reducidos sus números, pretende restaurar la confianza en el sistema de métricas de la plataforma.
Si bien el golpe expuso una fragilidad en sus estadísticas, también representa un paso hacia la transparencia, obligando a la industria del streaming a replantearse cómo se mide el éxito y qué tan confiables son las métricas que se exhiben ante el público.
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