Después de la polémica vivida por las desarrolladoras hacia el segundo semestre del presente año en relación al juego cruzado, parece que cada vez más son éstas mismas las que se abren a la posibilidad de permitir la interacción entre los sistemas cerrados permitiendo la posibilidad al jugador de elegir dónde quiere jugar.
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El denominado «crossplay» ha demostrado en numerables ocasiones que no afecta directamente a las ventas de las diferentes consolas y muy por el contrario, fomenta la participación de las comunidades, el interés y casi que la preferencia por plataformas con esta posibilidad.
Dada la situación y el éxito que ha tenido Fortnite: Battle Royale con esta característica, hace algunas horas atrás Epic Games anunció el desarrollo de un código libre para implementar esta opción en todos los juegos que utilicen Unreal Engine, el motor gráfico de la compañía.
En su anuncio, la compañía asegura que haber probado el mismo código a compartir con más de 200 millones de jugadores a través de 7 diferentes plataformas en todo el mundo con el modo de juego de batalla campal de Fortnite, demostrando la eficacia del sistema y comprometiéndose con la característica, ofreciendo esta opción de manera gratuita.
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