A pocos días de su lanzamiento, el nuevo videojuego MindsEye, desarrollado por el estudio Build A Rocket Boy, ha quedado envuelto en una inesperada controversia. El título es liderado por Leslie Benzies, histórico desarrollador y antiguo presidente de Rockstar North, ampliamente reconocido por su papel clave en la creación de la exitosa saga Grand Theft Auto (GTA).
Y recientemente, uno de los principales responsables del nuevo estudio, asegura que algunos jugadores están siendo pagados para criticar negativamente el juego.

¿Quién es Leslie Benzies?
Por si no estabas al tanto de este, te contamos que Benzies, de 54 años y originario de Escocia, se desempeñó hasta 2016 como presidente de Rockstar North. Durante su gestión, fue productor principal de títulos emblemáticos como GTA: San Andreas, Liberty City Stories, Vice City Stories, GTA IV, GTA V y Red Dead Redemption. En la industria, su nombre es sinónimo de innovación, ambición y éxito comercial.
Tras su salida de Rockstar, Benzies fundó su propio estudio independiente, Build A Rocket Boy, con sede en Edimburgo. Desde entonces ha estado trabajando en MindsEye, un ambicioso videojuego de acción en tercera persona que promete una experiencia cinematográfica, profunda y cargada de críticas sociales.
Su lanzamiento está programado para el 10 de junio de 2025 a través de la plataforma Steam, pero antes de su estreno, se han dado a conocer datos que han generado nuevas alertas.

Acusaciones de manipulación en las reseñas
La polémica se desató el 27 de mayo, cuando un usuario del servidor oficial de Discord de MindsEye planteó una inquietante pregunta: ¿cree el equipo de desarrollo que las críticas negativas hacia el juego podrían estar siendo financiadas por terceros?. La pregunta fue respondida de forma categórica por Mark Gerhard, director ejecutivo adjunto de Build A Rocket Boy, quien afirmó con contundencia: “100 %”.
Poco después, Gerhard añadió: “No es difícil adivinar de dónde proviene” y, aunque no mencionó nombres, muchos interpretaron la insinuación como una velada referencia a Rockstar Games o su empresa matriz, Take-Two Interactive, antiguos empleadores de Benzies.
Las palabras de Gerhard desataron una ola de especulaciones en redes sociales, donde se debate intensamente sobre la posibilidad de una campaña organizada para desacreditar el juego antes de su estreno. Esto ya que desde la presentación de sus primeros avances, MindsEye ha generado una mezcla de entusiasmo y escepticismo.
Aunque algunos jugadores han elogiado la propuesta estética y la narrativa futurista, muchos otros han dejado comentarios mordaces en plataformas como Reddit. Entre las opiniones más duras se encuentra la de un jugador quien dice: “Este juego se ve tan aburrido. Pero parece uno de esos títulos de PS3 que solía jugar mucho. Tiene algo de nostalgia”.
“Se siente como un juego de los años 2000. Como si lo hubieran hecho solo porque GTA 3 fue un éxito y todos empezaron a hacer clones”, dice otro.

Es así como para cerrar, mientras el mundo de los videojuegos espera el debut oficial de MindsEye, la controversia crece. ¿Está realmente siendo víctima de una campaña de desprestigio financiada? ¿O simplemente se enfrenta a las altas expectativas que supone ser el “nuevo juego del creador de GTA”?
Sea cual sea la verdad, el próximo 10 de junio el público tendrá la última palabra.
Editorial de GTA elimina todo rastro de sus referencias a la diversidad en su informe anual
En medio de un clima político cada vez más hostil hacia las políticas de diversidad e inclusión en Estados Unidos, varias compañías han comenzado a suavizar o eliminar sus compromisos públicos en esta materia.
Take-Two Interactive, editorial de franquicias como Grand Theft Auto y Borderlands, ha modificado drásticamente su informe anual, omitiendo referencias a su historial de apoyo a trabajadores LGBTQ+ y acciones de equidad laboral.

En su informe 10-K correspondiente a 2025, presentado ante la Comisión de Bolsa y Valores (SEC), Take-Two eliminó la sección titulada “Diversidad, equidad e inclusión” (DEI) y la reemplazó por una más general llamada “Comunidad y compromiso”. La mención a “diversidad” ahora se limita a una vaga “diversidad de pensamiento”, sin detallar programas, becas o esfuerzos específicos de contratación diversa.