Luego de la polémica suscitada por la declaración de Peter Moore, quien dijo haber demostrado Battlefield 4 con un equipo modificado, y varias fotos que dejaban ver a máquinas con Windows corriendo demos en el booth de Microsoft, varios desarrolladores desmintieron que todos los juegos hayan sido mostrados en plataformas distintas a Xbox One.
En concreto, Jonathan Blow, creador de Braid, y Michael Wilford, cofundador de Twisted Pixel, sostuvieron un acalorado debate sobre la situación. Todo comenzó cuando Blow señaló que todos los juegos del PlayStation 4 que fueron presentados estaban funcionando en kits de desarrollo. Sin embargo, lo comentó en referencia a una foto de un título de Xbox One que estaba corriendo en una PC. El cofundador del estudio a cargo de ese juego, Michael Wilford, confrontó a Jonathan Blow y dejó muy claro que únicamente fue su caso y que fue decisión del estudio, y no de Microsoft, recurrir a esa alternativa.
Después, los dos desarrolladores llegaron a un acuerdo. Al parecer, la mayoría de los títulos mostrados en el booth de Microsoft en el pasado E3 estaban corriendo en kits de desarrollo de la consola, salvo contadas excepciones de estudios que decidieron presentar sus títulos en computadoras de alto rendimiento. Otro desarrollador también apoyó a Wilford y comentó que la mayoría de los demos funcionaban en versiones de desarrollo de Xbox One.
Al final, no es una práctica poco común exhibir demostraciones de juegos de consola en computadoras de alto rendimiento. La crítica de Blow señalaba que, en el caso de los juegos AAA, esto podría llevar a que lo presentado superara en calidad visual al producto final; sin embargo, el único caso confirmado por fotografías es el del título Lococycle, desarrollado por Twisted Pixel, quien ya aclaró la situación.
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