Te contamos todo lo referente al fenómeno del Swatting a streamers

Es probable que ya hayan escuchado sobre reportes de Swatting afectando a variados streamers de Twitch. Momento de explicar de qué trata todo esto. “Swatting” es un verbo creado por la Internet nacido de la palabra SWAT, acrónimo para “Special Weapons And Tactics”, un equipo policial dedicado a cubrir situaciones delicadas de “terrorismo”.

Estos en Estados Unidos son llamados a actuar especialmente cuando algún atentado involucra rehenes. Actualmente cualquiera puede llamar a la policía y reportar un caso de atentado ocurriendo en cualquier lugar dentro de dicho país. Esto ha sido aprovechado por gente inescrupulosa que solo desea aprovecharse del sufrimiento ajeno para, en palabras simples, jugar una mala broma.

Dicha habilidad se ha utilizado múltiples veces, pero ha alcanzado notoriedad mediante Twitch, esto debido a que muchos streamers populares en dicho servicio han sido afectados por ello. Básicamente buscan la información del jugador hasta dar con su dirección. Acto seguido, llaman a policía asegurando que este tiene rehenes en su hogar y los están amenazando. Muchos de ellos han recibido a la policía en vivo, y dado que estos no tienen la capacidad inmediata para dar de baja su transmisión, miles de personas en el mundo pueden ver como la ley actúa sobre estos.

Si bien al final del día la policía deja en libertad a los muchachos, que no han cometido crimen alguno más que disfrutar de jugar sus videojuegos favoritos en público, las ramificaciones de estos actos son severas.

Para empezar, el streamer junto a quien vive, ya sean amigos o familia, pueden quedar con trauma o miedo de seguir exponiendo sus vidas públicas, lo cual simplemente hicieron para entretener al público general. En el último caso de Joshua Peters, de 27 años, quien aún vive con su familia, su hermano menor de 10 años fue apuntado con armas por la policía al atender la puerta, lo cual podría provocar severos cambios en su personalidad y traumas a futuro.

También esto es un problema para la policía, ya que terminan gastando dinero de los contribuyentes innecesariamente en casos que no requieren tamaña movilización de los uniformados para ir a contrarrestar casos de violencia que nunca ocurrieron, afectando directamente a la gente que paga sus impuestos, los cuales benefician a la policía y que se ocupan en esta clase de situaciones, sin mencionar la enorme pérdida de tiempo que resulta la movilización y actuar de los “protectores de la paz”.

Lamentablemente no hay mucho que streamers, Twitch, la policía o el gobierno puedan hacer al respecto, cada ciudadano tiene derecho a actuar libremente y ellos solo se aprovechan llevándolo al libertinaje. Acá hay un claro caso de odio u envidia, como lo prefieran, donde, aparentemente, una persona popular que puede cumplir el sueño de vivir transmitiendo juegos al público queda expuesta a esta clase de hechos solo porque si.

Esta situación está lejos de terminar, pues como mencionamos, cualquiera puede llamar a la policía e informar sobre alguna de hecho delictual que pueda o no estar cometiendo una persona, lo cual también levanta cuestionamientos sobre cuan segura es la privacidad de la gente y sobre las medidas que los afectados puedan tomar al respecto.

Por ahora es un tema de nunca acabar, todo dependerá de la privacidad del aludido, el discernimiento de la gente sobre como manejar su información personal en línea. De momento lo mejor que puede hacerse por los afectados es apoyarlos económicamente mediante donaciones para lidiar con cualquier problema que esto pueda afectar, aunque claro, no importa todo el dinero del mundo cuando se ha vivido la horrible experiencia de ser culpado por un crimen que nunca se cometió.