Un nuevo caso de videojuegos considerados con poco tacto se ve en el mercado móvil, en esta ocasión hablamos del juego Pakistan Army Retribution, un videojuego que buscaba honrar la memoria de los mártires del ejercito pakistaní, pero tuvo la discutible idea de hacer que los hechos de este giraran en torno a la masacre de Peshawar al noreste de dicho país, donde 128 personas murieron (en su mayoría niños) cuando un grupo de Talibanes atacó una escuela en diciembre de 2014.
En Pakistan Army Retribution tomabas el rol del ejército que llegó a dicha escuela a abatir a los atacantes. A pesar de mostrar el lado heroíco del trágico hecho, incluyendo defender a los pequeños inocentes, no deja de ser de mal gusto la elección de dicha misión, una matanza masiva real la cual nadie quisiera recordar, menos mediante una forma de entretenimiento, siendo apabullado por los medios y la crítica, al punto de decir que "falla en absolutamente todo."
El juego fue comisionado por el mismo gobierno de Pakistán bajo su ala de Tecnología de la Información de Punjab. Su director, el Dr. Umar Saif, pidió disculpas al respecto, lo consideró "de mal gusto" y ordenó que sea dado de baja en Google Play, "Gracias por hacernos dar cuenta de este error."
Si bien en los videojuegos no es raro ver hechos bélicos reales, como los shooters de la segunda guerra mundial, los casos más recientes son vistos con mayor sensibilidad, basta ver por ejemplo juegos de disparos basados en el mundo real que también han dado que hablar como han sido Hatred, Kill The Faggot, y experiencias basadas en la muerte de Osama Bin Laden. Call of Duty tampoco se ha salvado de esto con sus juegos de temática moderna, los cuales si bien son ficción, no quedaron fuera de polémica. como ocurrió en su momento con la misión "No Russian" de Modern Warfare 2.
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