Dragon Ball Super: Broly elevó el nivel de pelea de las películas de la franquicia

Vuelve el enemigo más furioso y desde hoy sentimos su ki en los cines del país

Dragon Ball Super: Broly elevó el nivel de pelea de las películas de la franquicia

Vuelve el enemigo más furioso y desde hoy sentimos su ki en los cines del país

Editorial: Cine & Series / Facebook / Twitter / Cobertura

La última saga de la serie Dragon Ball Super (DBS) dejó algunos alucinando y otros tanto decepcionados, pero como Toei Animation quiso seguir explotando su mina de oro del anime, se sumaron a lógica de los refritos y sacaron un personaje directamente de las cintas de VHS: Broly, el saiyajin más brutal y traumatizado del universo 7.

Gracias a Zeno-Sama y Cine Fox Chile la película llegó a los cines nacionales, así que te contamos un poquito para que sepas a que te enfrentas. Primero, les aviso que se tienen que olvidar de esas películas cortas que nos gustaban en los noventas, porque acá el cuento es otro, muchachos y muchachas. Ahora los integraron a la cronología de DBS.


Squad goals. La moda para guerreros para esta temporada de invierno.
Squad goals. La moda para guerreros para esta temporada de invierno.

Dicho esto, todo comienza hace muchos años en una galaxia muy lejana, cuando el Planeta Vegeta era próspero. No mentira, tan bonito no era, nos muestran una sociedad estratificada donde los bebés eran clasificados al nacer según su nivel de pelea y eran criados de una forma despersonalizada enviándolos a planetas lejanos. Porque los monos estos mantienen un modo de producción basado en conquistas planetarias para venderlos a los patrones de fundo del universo, el clan Cold.

En esta primera parte de la película uno aprende un poco más de la cultura saiyajin. Mientras nos reinventan la historia de origen de Gokú y Broly, contándonos un rollo bien interesante del padre de nuestro héroe, Bardock, que a diferencia de los demás tenía un poco más de conciencia. La estructura fundamental de la historia que conocemos se mantiene: Freezer destruye el planeta y Kakarotto es enviado a la tierra en una cápsula, convirtiéndose en el Clark Kent del universo 7.


A Vegeta le dan protagonismo y alucinantes momentos en esta entrega.
A Vegeta le dan protagonismo y alucinantes momentos en esta entrega.

Ese es solo el prólogo, porque de pronto ¡elipsis! Pasaron los años y Gokú y Vegeta están entrenando re tranquilos, mientras una trama intergaláctica se arma y las sombras de la corrupción del planeta saiyajin perseguirían a nuestros héroes hasta tiempos presentes. Suspenso. Porque resulta que Broly y su viejo, que es como el Luisito Rey de esta realidad, también sobrevivieron a la explosión de su mundo. Y ahí se nos juntan las cosas: la sed de venganza de estos sobrevivientes y el odio despreciable del emperador Freezer, quien recuperó su ejército.

Y hasta ahí no más les cuento sobre la trama, porque si terminaron de ver DBS lo lógico es que vayan a su cine más cercano y vean como sigue la historia. Pero si no te gustó tanto la última serie y echas de menos la anterior, ¡también! Porque en serio el film se siente como sacado de los 90s, la animación y los colores son mucho más parecidos a DBZ, pero con las sofisticadas técnicas de la animación contemporánea.

Las secuencias de pelea son increíbles, tienen varios guiños a los OVA antiguos de la serie. Aparte Broly se manda unos shows dignos de Hulk, apaleando rivales y enojándose de lo lindo, cosa que uno dice todo el rato “ay eso dolió”, “mira como le pegan al Gokú” y cosas así.


¡Miren que referencia nada más!
¡Miren que referencia nada más!

¿Algo que pudo ser mejor? Los muchachos de Dragon Ball son como esos amigos con los que creciste y da gusto saber de ellos y verlos compartir. Tenemos un par de escenas graciosas entre Gokú y Vegeta, pero se extrañaron algunos viejos amigos. En vez de eso nos muestran personajes nuevos con los que nos cuesta vincularnos y como que quieren que nos importen a la fuerza. Así que mala jugada ahí, maestro Toriyama.

Lo otro, no sé si es el soundtrack o un problema del doblaje (a propósito, las voces latinas clásicas son increíbles), pero durante las peleas más cruciales sale un sonido que inicialmente te saca de onda. Se sube el volumen y se escuchan unas voces gritando los nombres de los personajes.

Finalmente, si bien es un film que no te va a cambiar la vida, Dragon Ball y aunque tiene algunas cosas predecibles (como toda película), apela al recuerdo y a una tradición del anime. Verlo en pantalla grande resulta una experiencia divertida y estimulante. Yo recomiendo que vayan con sus hermanos y amistades con los que veían la serie y se quedaban jugando al “kokú”, porque más de un lindo recuerdo pueden revivir.


Si quieres ir a ver la película te dejamos el siguiente dato: puedes hacer click aquí e ingresar al sitio para buscar todas las salas de cine dónde estará en exhibición a nivel nacional.




Editorial: Cine & Series / Facebook / Twitter / Cobertura

Comentarios

  • Facebook

  • Tarreo

 
 
  • Mejores

  • Nuevos

    Advertising