Nintendo confirma que Zelda Breath of the Wild y Tears of the Kingdom no son parte de la línea de tiempo oficial de la saga

Una nueva revelación sobre una de las sagas más queridas y populares de la industria de los videojuegos ha sorprendido a su comunidad. Esto ya que Nintendo ha confirmado que sus últimos títulos, The Legend of Zelda: Breath of the Wild y Tears of the Kingdom, no forman parte de la línea de tiempo oficial de la franquicia.

Según un informe del medio Vooks, durante el evento Nintendo Live 2024 en Sídney, la compañía presentó una actualización de la cronología de Zelda, en la que ambos juegos se muestran como títulos independientes, desconectados de cualquier otra entrega de la serie. Esto significa que no hay juegos anteriores ni posteriores a los eventos de estos títulos en la cronología oficial. Recientemente, Nintendo anunció la publicación de The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom Master Works, un libro de arte y lore que incluirá una nueva línea de tiempo. Sin embargo, por ahora, el libro solo está disponible en Japón, por lo que aún no se conocen los detalles de su contenido.

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Aunque la línea de tiempo tradicional sigue un curso relativamente lineal hasta Ocarina of Time, a partir de ese punto se divide en tres ramas distintas, lo que ha generado cierta confusión entre los fans. No obstante, Nintendo ha modificado la línea de tiempo en el pasado, lo que sugiere que aún podría no haber tomado una decisión definitiva sobre la ubicación de los nuevos títulos. En la nota de Vooks, se menciona que “La línea de tiempo de Zelda es objeto de gran debate, y es tan actual o precisa como cuando Nintendo decide cambiarla”, acompañada de una fotografía de la presentación donde se ve a ambas entregas apartadas.

Esta decisión de Nintendo sugiere que tal vez no deberíamos darle demasiada importancia a la línea de tiempo de Zelda. La idea de que los juegos de la serie estén conectados en un sentido cíclico, con Zelda, Link y Ganon condenados a repetir sus batallas a través del tiempo, resulta más atractiva que la idea de una secuencia lineal de eventos.

Hace 24 años, Link podía hacer algo imposible actualmente en la saga The Legend of Zelda, matar a un NPC

Aunque la acción y la aventura siempre han sido partes centrales de The Legend of Zelda, Link ha sido un héroe clásico, dedicado a proteger a los NPCs del mundo del juego de toda clase de peligros. Usualmente, solo los monstruos y criaturas oscuras creadas por Ganon u otros enemigos eran eliminados.

Sin embargo, en The Legend of Zelda: Majora’s Mask, lanzado para la N64 hace 24 años, el jugador tenía en sus manos el poder de hacer algo que hoy parece impensable: matar a un NPC humano.

El NPC en cuestión es Sakon, un ladrón que asalta a la propietaria de una tienda de bombas durante la noche y en el juego, Link puede detener a Sakon de varias maneras.

Si usa la espada, el ladrón huye dejando atrás su botín, permitiendo a Link obtener la Máscara de Bombas como recompensa. Sin embargo, si Link emplea flechas o el gancho para detener a Sakon, las bombas que lleva explotan, matándolo junto con su carga.