Los días 6 y 7 de Mayo ocurrió un espectáculo que muchos han estado esperando desde que se anunció el año 2012 cuando detallaron que iba a existir una sinfónica encargada en hacer arreglos y componer canciones de The Legend of Zelda, haciendo tours por todo el mundo y demostrando musicalmente como Koji Kondo es uno de los mejores compositores de videojuegos en el mundo.
The Legend of Zelda: Symphony of the Goddesses es un concierto sinfónico producido por Jeron Moore y Nintendo, con arreglos y dirección musical de Amy Andersson, quien también es fanática por las aventuras de Link. Este interesante evento estuvo presente el día de viernes y sábado en el Teatro Cariola, en Santiago de Chile y lo que ocurrió fue una mezcla muy intensa de emociones, desde la nostalgia hasta un espíritu por querer saber sobre el futuro de esta franquicia amada por todos los fanáticos de los videojuegos.
La obertura hacia la nostalgia
Primero que nada, uno de los detalles más interesantes ocurridos en este evento fue la masiva llegada de personas a él, no importaba si el precio de las entradas era un poco elevado o si tenían que hacer una larga fila por más de una hora para esperar la apertura de las puertas para poder encontrar el mejor asiento y disfrutar de todo lo ocurrido, la asistencia del público fue notoria y no podría definir sobre un género mayoritario o edad, ya que pude ver un equilibrio entre hombres y mujeres como también personas adultas como niños, padres asistiendo con los hijos y ambos con sus respectivas poleras de Legend of Zelda que traían desde su hogar.
Ya en el inicio pudimos apreciar que esto se venía con todo, ya que la obertura de Legend of Zelda fue una de las composiciones más maravillosas de todo el evento, con una presentación de todos los instrumentos hasta el coro, dando a entender la calidad de la sinfónica como también de los arreglos y el trabajo musical que llevaba varios años siendo interpretado por todo el mundo.
Después de esto empezaron los arreglos específicos para cada videojuego, donde los más notorios fueron sin lugar a dudas el Ocarina of Time y el Wind Waker, dos grandes títulos emblemáticos para todos, que marcaron etapas generacionales donde se unieron casi todos los fans actuales de la franquicia Zelda.
En relación a Ocarina of Time, debo decir que fue el que dio el golpe más duro emocionalmente a todas las personas que asistieron a este evento, ya que si bien Gerudo Valley y Boss Battle fueron las canciones que dieron inicio a todo lo relacionado a Ocarina, pero Title Theme fue la que hizo suspirar a muchos, se escuchaba en el público un “Ohhh” de muchos lados y cuando miraba alrededor mío veía algunas personas con los ojos llorosos y otros de por sí llorando o con lágrimas cayendo. Fue un momento bastante emotivo y donde tocó la nostalgia de muchas personas y una de las canciones que recibió más aplausos, ya que, como eran arreglos eran varias canciones de cada juego y la de Ocarina of Time fue la más esperada por muchos, se veía por el rostro del público.
Wind Waker también tuvo su momento de grandeza dentro de este evento, ya que fue el segundo juego con más arreglos y claramente tenía que ser así, porque es uno de los Zelda con mejores canciones o con una de las mejores bandas sonoras, en especial porque tuvo su reboot en WiiU y muchos que no lo habían jugado pudieron apreciarlo en su versión HD y con alguno que otro cambio en la banda sonora pero no tan fuerte para así disfrutar de este juegazo de Nintendo Gamecube. También tuvo su recopilación de canciones aunque casi al final del show se le dio un último respiro con Dragon Roost Island, la canción más apreciada por los fans de este título, así que de verdad se agradece mucho que la hayan separado del medley y haberle rendido tributo con un arreglo hermoso y lleno de cuerdas.
Lo interesante acá y algo que no sabía ya que no me quise hacer un spoiler de la setlist del concierto fue que tenían canciones de A Link Between Worlds, el título que salió para Nintendo 3DS el año 2013. Aunque no lo he jugado debo decir que el arreglo estuvo maravilloso, bien compuesto y con una noción muy fuerte de lo que la gente quería escuchar de este título, ya que, al ser algo bastante nuevo no es tan interesante de escuchar en una sinfónica ya que más que un arreglo puede resultar un cover pero Amy Andersson se encargó de darle un toque personal e interesante a esta banda sonora, la destaco por sobre otras canciones.
Uno de los arreglos más “épicos” de todo el show fue sin lugar a dudas el medley de Twilight Princess, que de por sí la versión de Nintendo Wii tiene unas composiciones maravillosas, pero cuando me refiero a “épico” es porque el uso drástico de coros e instrumentos de percusión se notó más que en otras canciones, hizo que el público quedara impactado y atónico porque se transmitía una linda emoción y un recuerdo por ser uno de los Zeldas más maduros respecto a historia y gameplay.
Hubo un momento para recordar uno que ya en la actualidad es un clásico y de por si mi Zelda favorito (aunque esto ya es personal) que es el A Link to the Past, demostrando un Medley increíble y bueno, en general estos son los Zelda que da gusto escucharlos tras una sinfónica ya que, en la época de Super Nintendo añadir más sonidos más elaborados era algo complejo, por ende sentir la emoción de un título increíble e insisto, para mi el mejor de esta hermosa saga te pone la piel de gallina, te transmite esa emoción de querer jugarlo nuevamente, de hecho lo haré y espero que lo hagan ustedes también, es un juego que vale la pena darle un espacio en tu agenda de “cosas que anhelo jugar”. El trabajo de cuerdas al momento de interpretar Zelda’s Lullaby fue lo más hermoso de todo este medley.
Para finalizar la sinfónica interpretó Ballad of the Goddesses del Skyward Sword, que este debe ser uno de los Zelda con mejor interpretación sinfónica de todos, ya que la mezcla de instrumentos hizo que el final de toda esta aventura musical nos dejara con un gusto de querer escuchar más, que habían canciones que si tenían que estar pero no estuvieron como también el deseo de que el show durara más de las 2 horas que duró (contando el entre tiempo y el encore). En lo personal yo quería escuchar Skyloft del Skyward Sword pero bueno, tal vez en otra ocasión pueda sentir esa interpretación por parte del maravilloso trabajo y arreglo de Amy Andersson. Un pequeño punto que quiero destacar es la aparición de Shigeru Miyamoto y Koji Kondo en unos videos que se ponían al finalizar algunas canciones, dando las gracias o contando la experiencia de crear Zelda y la banda sonora, algo muy notable para los fans de esta franquicia y de Nintendo.
Impresiones generales
El concierto tuvo una gran aceptación por parte de varias personas, aunque para mi el Teatro Cariola no era el lugar indicado para eventos como este, ya que la acústica en algún momento se perdía (aunque el Cariola en comparación a otros lugares si tiene buena acústica), hubiese preferido un teatro indicado para un concierto de música clásica u orquesta, ya que este no era un concierto con guitarras distorsionadas ni nada por el estilo. Los puestos eran simplemente asientos de plástico con metal, lo cual me dejó con una clara idea de que el intermedio era muy necesario para estirar las piernas, ya que no sentía comodidad al estar sentado, pero era de entender si el Cariola no posee asientos necesarios tipo butacas para poder presenciar espectáculos, aunque eso es algo netamente del recinto, no de la productora ni del show en sí (otra razón para haber seleccionado otro lugar).
Aparte de lo mencionado, nada más me inquietó, la seguridad era buena y el espectáculo en sí fue muy agradable, nostálgico y con una composición ejemplar y digna del precio de las entrada.
Para finalizar, pensé mientras estábamos todos impresionados con la calidad musical de Legend of Zelda que las personas que jugamos videojuegos desde que somos pequeños nos hemos criado con música increíble, ya que al tener que escuchar constantemente canciones de manera repetitiva mientras jugamos un videojuego afinamos nuestro oído y nos interesamos más en arreglos y composiciones musicales, más que las personas que se han criado toda su vida con canciones pop o interpretaciones basadas en la cultura popular o géneros musicales actuales. Los “jugadores” tienen la habilidad y el privilegio de poder apreciar y sentir distintos tipos de géneros musicales y eso nos transforma en personas con una aceptación más grande respecto a música.
La gente que se crió jugando RPG puede estar de acuerdo conmigo que la música es un ítem muy importante a la hora de engancharse de un título donde debes leer mucho y pensar qué arma y armadura sirven para combatir mejor al enemigo. Creo que Koji Kondo logra llegar a estos corazones de buena manera, entiende el concepto de jugar por horas mientras escuchas una buena canción y la tarareas mientras vas camino al colegio, universidad o trabajo y eso fue lo que noté en The Legend of Zelda: Symphony of the Goddesses, que para nosotros, las bandas sonoras de videojuegos son nuestras canciones a tararear por el resto de nuestras vidas y nos debemos sentir privilegiados por esto, ya que somos parte de una generación que ha podido disfrutar de muy buena música y un entretenimiento distinto a todas las generaciones pasadas.
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